Más de 200 estudiantes, docentes, graduados y no docentes participaron, el pasado 27 de junio, de la Primera Jornada Institucional de Niñez realizada en la FTS. En el encuentro, el Espacio de Referencia de Niñez, como parte de la política institucional de la Unidad Académica, instaló la necesidad de que se abordara, entre muchas líneas de trabajo, la vinculada a la profundización de canales de diálogo y análisis en torno a la niñez en la facultad.

En este sentido, la jornada posibilitó el debate en las diferentes comisiones -que retomaron el aporte brindado por los panelistas- de diversas problemáticas, entre las que se destacaron el análisis del rumbo que han tomado las políticas públicas en materia de Niñez y la definición de las políticas e intervenciones necesarias para la plena vigencia del sistema de promoción y protección de derechos de niños, niñas y adolescentes.

Cabe mencionar que, durante el desarrollo de la actividad, adquirió una relevancia especial la reflexión sobre las condiciones laborales de los trabajadores del sistema, destacando que la interpelación, y sobre todo, la defensa de los derechos resultan de acciones colectivas inherentes para la consolidación y construcción de un sistema de promoción y protección integral de derechos de niños, niñas y jóvenes, concebido desde el marco de corresponsabilidad.

Asimismo, se puso énfasis tanto en la desnaturalización de la presencia de niños en situación de calle como una de las manifestaciones más agudas de la cuestión social que afecta a estos sectores, como en el reconocimiento de los avances realizados en la promoción y protección de derechos en materia legislativa. Sin embargo, se alertó sobre los riesgos que entrañan los procesos de desfinanciamiento de la política social y la tercerización de la atención de los sectores más vulnerables.

En la misma línea de análisis, se estableció la necesidad de abordar la construcción de dispositivos institucionales que posibiliten prácticas que sitúen a niños, jóvenes y trabajadores en un lugar  diferente, es decir, trabajar y pensar la niñez y juventud desde una perspectiva no punitiva que permita la erradicación de la estigmatización de niños y jóvenes de los territorios de relegación social.

Es importante señalar que el encuentro  se caracterizó  por el diálogo y  la puesta en común de las diferentes  perspectivas que posibilitaron  la reflexión sobre la problemática en la facultad, la desnaturalización de determinadas situaciones y la generación de interrogantes sobre los deberes y responsabilidades que competen al Estado y la comunidad educativa,  en el marco de la corresponsabilidad para constituir, desde el consenso,  estrategias conjuntas.

Finalmente,  se planteó  la necesidad de sostener canales de interlocución con la comunidad educativa, las organizaciones sociales y  los trabajadores de niñez con el propósito de construir un claro posicionamiento como unidad académica respecto del contexto actual y de las responsabilidades diferenciadas de todos los actores que intervienen en la problemática.

La FTS agradece a los participantes de la jornada, especialmente a los panelistas que compartieron sus saberes y experiencias:  Alfredo Carballeda, Pilar Fuentes, Silvina Rivas, Emilia Preux, Virginia Terzaghi y Silvina Pantanali.

El panel de cierre se brindaron los siguientes interrogantes y reflexiones:

El rector de estas cuestiones debe ser el interés superior del niño. Sin embargo,  ¿cómo construimos esos sentidos necesarios para que nos sirvan al momento de poder intervenir? ¿Qué es escuchar al niño? ¿Desde dónde lo escuchamos? ¿Qué significa la escucha? ¿Qué espacio le ofrecemos a través de los dispositivos institucionales? ¿Qué mediaciones son necesarias para alojar a un niño? ¿Qué límites tenemos que introducir para poder escuchar a un niño?

Un niño reconocido como sujeto de derecho, un sujeto de deseo, al que se le amplié la ciudadanía, que sea capaz de ser parte de un proceso emancipatorio, tiene que contar con otro que lo pueda enmarcar, alojar, que le pueda ofrecer un para qué, decir para allá vamos.
Sin este lugar de los adultos no hay niño posible, no hay restitución de derecho posible.